Ausencia,
el ahora, las cadenas, mi condena.
Tu
y yo, tu mirada, tu presencia.
El
aroma en tu cuerpo.
Tus
besos alados,
tus
besos de nostalgia.
Perseguirte
en sueños,
atraparte
en días soleados,
espejismos
de siestas de verano.
Lágrimas
no caídas.
Palabras
abandonadas
a
recuerdos futuros.
Despedida
del adiós.
Abandono
del deseo.
Gestos
sin manos.
El
revés de tus palabras,
caída
de tu voz en mis labios.
Ventana
abierta a un hombre lleno de puertas,
cerrojos
de tus incógnitas.
Muro
de mis deseos.
Fin
del pincel que marca el trazo
hacia
el laberinto que es tu casa
entre
las montañas olvidadas de mis recuerdos.
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